situso

Parrilli culpa a Stiuso de no investigar caso Amia luego de 10 años de avalarlo en la ONU

La AFI, la inteligencia del gobierno K, denunció a Antonio Jaime Stiuso por incumplimiento de deberes de funcionario público por no presentarse a explicar supuestas maniobras dilatorias en la investigación del caso AMIA junto con el fiscal Alberto Nisman. En una sola denuncia, Oscar Parrilli, el jefe de los espías más mediático del mundo, puso a dos acusados en el banquillo: Stiuso y Nisman. Uno vive y está exiliado. El otro está muerto y ya no puede hablar.

En su denuncia, Parrilli asegura asertivamente que la investigación del caso AMIA no llegó a ningún resultado y fue un gran fracaso. No se llegó a nada. Solo culpa de ello a Stiuso pese a que el ex espía tenía por encima a Héctor Icazuriaga, ex jefe de la SIDE, a Francisco Larcher, número dos, y al propio Néstor Kirchner hasta 2007 y luego a Cristina Kirchner, que eran sus jefes directos.

Néstor no opinaba lo mismo cuando vivía. Hacía hablar a Stiuso con sus subalternos para mostrarles todo lo que sabía, las maravillas que había investigado de la AMIA. Y se complacía con tanta información. Una vez lo hizo pasar junto a Larcher a explicarle todo a Alberto Fernández. Durante dos horas el ex capo de los espías abarrotó de datos al ex jefe del Gabinete. Hablaba de Medio Oriente y de células terroristas como si fuera la interna del PJ.

Tan maravillado quedó Néstor con la investigación –sí, la de Stiuso- que durante diez años el kirchnerismo denunció a Irán ante la ONU y lo exhortó a que extraditara a los ocho funcionarios del régimen iraní acusados del atentado de 1994 para que declararan en la Justicia argentina. Esa medida había sido pedida por el juez Rodolfo Canicoba Corral, a instancias de Nisman y por la investigación de Stiuso. Kirchner avaló la investigación ante la ONU hasta 2007. Cristina lo hizo de la misma manera hasta 2013. Las conclusiones de Stiuso-Nisman valían.

¿Por qué ahora no valen? El Gobierno mintió ante la ONU cuando decía que tenía la certeza de la culpabilidad de los imputados iraníes acusados por Nisman y Stiuso. O miente ahora que dice que tiene la certeza de que Stiuso no investigó nada. Su cambio de postura se produjo luego de que firmó el pacto con Irán para que esos imputados declararan en Teheran y ante el juez y una Comisión de la Verdad. El cambio, el giro, no tiene explicación lógica.

Para el Gobierno, ahora, Stiuso no investigó nada, y Nisman no tenía razón, porque ese es el nuevo relato para instalar que Nisman denunció al gobierno por encubrimiento porque en realidad quería disimular su propia impericia e inepititud. La denuncia de Nisman era para tapar su fracaso. Si Nisman debía esconder tanta mentira entonces su muerte ocurrió por suicidio o por una interna de espías que debían ocultar algo grande que no les convenía que se supiera. Esa es la lógica de la persecución a Stiuso, que no volverá al país hasta que cambie el gobierno.

Deja un comentario