Los gremios llevaron sus planteos al Gobierno y salieron conformes

LA NACION, 12 de febrero de 2016

En medio de una marcada suba de precios y de la discusión salarial, el presidente Mauricio Macri recibió ayer en la Casa Rosada a los principales jefes de la CGT, ante quienes se comprometió a avanzar en medidas económicas para preservar el poder adquisitivo de los trabajadores antes de comenzar las paritarias en las próximas semanas. La definición de los detalles quedará en manos de comisiones de técnicos del Gobierno y de los sindicatos, que evaluarán el impacto de esas medidas sector por sector.

Todos los protagonistas resaltaron el clima ameno de la charla y el gesto de acercamiento, pero los dirigentes sindicales le plantearon al jefe del Estado dos preocupaciones: la devolución y el reparto de los fondos de las obras sociales y los crecientes despidos en el sector industrial.

Luego de la reunión, el jefe del Gabinete, Marcos Peña, señaló que “fue una reunión muy positiva” y confirmó que el Gobierno presentará en el Congreso un proyecto de ley de rebaja al impuesto a las ganancias “la semana que viene o a más tardar la siguiente”.

Minutos antes, el titular de la CGT, Antonio Caló, dijo: “No nos vamos con soluciones pero nos vamos conformes. Se van a reunir los técnicos de los ministerios con los nuestros para seguir trabajando”. A su lado, el jefe de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, agregó: “Por ser la primera, fue una buena reunión”.

Además de los despidos y las obras sociales, otras preocupaciones fueron la inflación y las futuras paritarias. Pero no se fijó ningún piso ni techo para la pauta de aumento salarial.

El Gobierno pretende que los incrementos no sobrepasen el 25% y los sindicalistas reclaman un mínimo de 30%, aunque cada sector lo fijará más adelante. “Trabajaremos sector por sector para establecer cómo impactan las medidas en cada actividad”, dijo un alto funcionario, tal como anticipó LA NACION el último domingo.

La Casa Rosada procura que haya una sola paritaria anual y no se desdoble en forma semestral, aunque las mismas fuentes agregaron que “eso también se va a trabajar según cada sector”.

Las medidas que se discuten para preservar el poder adquisitivo son un proyecto de aumento del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, la rebaja del IVA para los alimentos a los sectores más vulnerables, la universalización de las asignaciones familiares, y la devolución y el reparto del Fondo de Solidaridad Social de 27.000 millones de pesos que controla el superintendente de Servicios de Salud, Luis Scervino.

“Lo más importante fue la foto”, sintetizó un alto dirigente gremial. Un funcionario coincidió: “Lo más saliente fue la reunión en sí misma, con todos los sectores”.

Macri estuvo con Peña y con el ministro de Trabajo, Jorge Triaca. De los jefes sindicales participaron Antonio Caló (CGT), Hugo Moyano (CGT Azopardo), Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca), Juan Carlos Schmid (Confederación de Trabajadores del Transporte, CATT), Armando Cavalieri (Comercio), Gerardo Martínez (Uocra) y Gerónimo Venegas (Uatre). Peña y Triaca adelantaron que en el futuro se invitará a la CTA, aunque no precisaron cuándo.

Más temprano, como señal a los sindicatos, el Presidente había anunciado un aumento del 15,35% en las jubilaciones, las asignaciones familiares y la Asignación Universal por Hijo.

Fue Cavalieri quien planteó la preocupación por los recursos de las obras sociales, mientras que el metalúrgico Caló mencionó los crecientes despidos en el sector industrial, como se informa por separado.

Macri respondió que la inflación es prioridad de su gobierno, así como convencer a los empresarios para preservar el empleo. Y dijo que es importante que los reclamos salariales no se disparen.

“Se van a formar comisiones para trabajar en la agenda que se había presentado: ganancias, IVA, asignaciones y obras sociales, entre los técnicos de los sindicatos y de los ministros”, señaló a LA NACION otro referente gremial.

Luego del encuentro, Schmid calificó el encuentro de “normal” y consignó: “Planteamos al presidente la necesidad de prestar especial atención a la inflación y a que no aumente el desempleo, a lo que respondió que eran las prioridades del gobierno”.

Schmid informó que Macri anunció que “a finales de marzo anunciará la situación real de la economía”, y agregó: “Pudimos dialogar con el Presidente, es algo que no ocurría con la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner”.

Peña dijo que la reunión “no fue para cerrar temas sino para abrir la conversación”, y que “hubo coincidencia casi total” con las tres CGT. “Tenemos claro que Ganancias es expresión de un problema más grande, que es la inflación, un problema que altera todas las condiciones de las escalas salariales”, explicó.

Triaca agregó que “empezamos a trabajar una agenda común, de diálogo”. En el Gobierno dijeron que la negociación paritaria será sector por sector porque “cada dirigente sabe dónde le aprieta el zapato”.

El Gobierno hace un balance positivo de los primeros 60 días

LA NACIÓN, 12 de febrero de 2016

En los primeros 60 días, el gobierno de Mauricio Macri considera que logró encaminar algunos desafíos económicos: la salida del cepo cambiario y la negociación con los holdouts. Disipó los nubarrones sobre la gobernabilidad y apaciguó el conflicto sindical para preservar la paz social. Sin embargo, el principal frente de tormenta es el repunte de la inflación.

“El balance es muy bueno en lo económico y político, por la construcción de gobernabilidad. Pero la inflación es un gran frente abierto”, dijo a LA NACION un funcionario cercano al jefe de Gabinete, Marcos Peña.

Macri celebra la salida del cepo, pese a que el dólar ayer tocó los 14,70 pesos y el kirchnerismo critica la devaluación y su traslado a los precios.

El Presidente demostró su gran preocupación ayer en Tres de Febrero. Dijo que su gobierno “está comprometido en reducir la inflación”, que “va a llevar dos o tres años” para “alcanzar los niveles de la mayoría de los países”.

Macri está convencido de que la inflación se desacelerará desde junio próximo. Para entonces prevé lograr sus dos grandes apuestas: inversiones para crear empleo y financiamiento externo para moderar el ajuste. El segundo semestre, espera, tendrá mejores noticias.

Según confiaron a LA NACION en Balcarce 50, el Presidente considera que la amenaza del PJ a la gobernabilidad está en vías de superarse. Celebró la división del Frente para la Victoria y el surgimiento en Diputados del Bloque Peronista, más dialoguista. Considera que el kirchnerismo perderá peso.

Cree que podrá acordar con el bloque del PJ del Senado, liderado por Miguel Ángel Pichetto, que ayer visitó la Casa Rosada, en señal de distensión. La Casa Rosada descuenta que logrará aprobar en la Cámara alta a mediados de marzo, a más tardar, a sus dos candidatos para la Corte Suprema: Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz.

Con la reactivación del diálogo, enmendó el error político de diciembre último cuando designó a los nuevos jueces por decreto y en comisión. El macrismo confía en que ahora podrá negociar la sanción de leyes clave en el Congreso.

Macri supone, además, que se consolida el frente Cambiemos. La UCR exige más participación en las decisiones, pero los macristas se reúnen con ellos semanalmente. La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, objeta algunas decisiones, pero la relación es de amistad y respeto. Ella valora que “Macri escucha” y retrocede cuando se equivoca.

Para prevenir traspiés políticos, Macri conformó una mesa de discusión para evaluar las medidas y la comunicación antes de anunciarlas.La Casa Rosada evalúa que el frente gremial está en vías de recomposición, tras el chisporroteo verbal de la semana última por aumentos salariales. Macri reunirá hoy a los jefes de las tres CGT y a los principales popes gremiales. Negocia un paquete para moderar la pauta de las paritarias en torno al 25% a cambio de rebajas en Ganancias, el IVA y subas en asignaciones familiares. Y de que haya una sola paritaria.

Gobernadores

Con los gobernadores, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, negocia adelantos de fondos, aumentos de coparticipación, compromisos de obras públicas y permisos para endeudarse en el exterior.

La política exterior es su otra esperanza. Revirtió, cree, el aislamiento mundial en Davos. El lunes próximo recibirá al primer ministro de Italia, Matteo Renzi; el 24 del actual al presidente de Francia, François Hollande, y el 27 visitará al papa Francisco. Para marzo, viajará a Estados Unidos, a la cumbre de seguridad nuclear, y se encontrará con el presidente Barack Obama. La canciller alemana, Angela Merkel, lo invitó a Alemania y Macri aceptará.

El Presidente celebra la llegada inminente de créditos del BID y el Banco Mundial y el apoyo internacional para lograr un acuerdo con los holdouts: considera que en cuestión de días se logrará y anunciará la vuelta al mercado de capitales.

La crisis por la suba de tarifas de electricidad y los 6200 despidos en el Estado no asusta en Balcarce 50. Se vienen en días aumentos en el gas. Peña admitió ayer que “la situación fiscal es delicada”. Los subsidios costaron 280 mil millones de pesos en 2015. El déficit fue de 390 mil millones. Con el aumento de tarifas se ahorrarán 110 mil millones.

Pero el Gobierno considera que la gente descontaba las subas tarifarias y que los despidos de “militantes” del anterior gobierno tienen un 70% de aprobación pública.

Macri desmanteló el poder de la familia Liuzzi en la Casa Rosada

LA NACION, 8 de febrero de 2016

Por orden del presidente Mauricio Macri, el secretario de Legal y Técnica, Pablo Clusellas, comenzó a desarticular el mayor clan de la Casa Rosada: son 30 familiares y amigos del emblemático ex secretario Técnico, Carlos Liuzzi, mano derecha del ex titular del área, Carlos Zannini, de los cuales 11 ya fueron despedidos.

Es un organismo clave en el Gobierno porque elabora los decretos y proyectos de ley del Poder Ejecutivo.

Según pudo saber LA NACION, el primer desplazado fue Carlo Marco Liuzzi. “Charly” Liuzzi, hijo del controvertido subsecretario, que actuaba como director de Enlace Internacional del Registros de Dominios de Internet (NIC.ar).

“Me echan por portación de apellido”, reaccionó Charly, dolido, al conocer la noticia.

La deducción no es tan brillante: toda la familia enquistada allí ganaba un promedio de $50.000 y, en su caso, Charly gozaba de beneficios adicionales, como permanentes viajes a todo el mundo.

Como los demás miembros del clan, fue nombrado en la planta permanente de la Secretaría de Legal y Técnica sin cumplir el requisito de ganar un concurso como establece la Ley Nacional del Empleo Público, la N° 25.164.

En la misma situación revistan, aún hoy, la mayoría de los 30 familiares y amigos de su padre, los que fueron alejados y los que aún siguen con cargos a pesar de la llegada de la nueva administración.

Liuzzi, que administraba los recursos de la secretaría conducida por Zannini, fue denunciado por frenar un allanamiento dispuesto por el juez Norberto Oyarbide a la financiera Propyme. Además, está investigado por supuestos vínculos con una consultora informática proveedora de su área, Adconsa, de su amigo Gustavo Benvenuto, y está imputado por el delito de presunto enriquecimiento ilícito durante la función pública: su patrimonio pasó de $265.000 en 2003, cuando llegó a la Casa Rosada, a $7.482.000 al cierre del año 2014.

Según fuentes de la Secretaría, tras abandonar el cargo, Liuzzi también reclamó el pago de vacaciones por 12 años que según dijo no se había podido tomar.

Pero Clusellas no está dispuesto a reconocerle nada porque hay constancias de sus continuos viajes al exterior, según describieron en Balcarce 50.

Además, la actual administración podría rescindir el contrato a Adconsa sobre la que pesan fuertes sospechas de sobreprecios por servicios informáticos.

La Secretaría tiene ahora 515 empleados y sólo tenía 294 en 2008: 53 de ellos contratados por Adconsa. Además, tenía dos mesas de entradas para los proyectos, con 47 personas, cuando con una mesa es suficiente.

Operatoria

Previsor, Liuzzi transfirió a su esposa, Thaiss del Corazón de Jesús Hidalgo, a la Procuración del Tesoro con categoría A4, de las más altas: es así como todavía permanece en el Estado. En 2015, ella estuvo cuatro meses sin ir a trabajar.

La gestión Macri desplazó a Gabriel Brenta, otro director de NIC.ar, que era íntimo amigo de Liuzzi y su “operador” informático.

Solían cambiar en forma periódica los programas de la Secretaría y cobraban por el trabajo.

También fueron alejados otros amigos de Liuzzi: Viviana Isola, directora del área de Jurídicos, y Roberto Micheli, subdirector de Informática. Entre los parientes están María de la Paz Daroqui, sobrina de Liuzzi, Juan José Benzoni, hermano del ex marido de la hermana de Liuzzi, Alejandra y Lidia Vateroni, hijas de la madrina de Liuzzi.

Ciertos amigos de Charly Liuzzi tampoco pudieron hacer carrera: Marcelo Martínez Virgilio, director de NIC.ar; Miguel Ignacio Estrada, director de la Unidad de Comunicaciones de NIC.ar, y Ariel Bruno, director en Sistemas. Todos fueron desplazados por la nueva gestión a cargo de Clusellas.

Otros “Liuzzi-boys”, como les dicen en el Gobierno, aguantan a pie firme, aunque la mayoría está en la cuerda floja. María Luján Liuzzi, hermana del subsecretario y liquidadora de pagos en el Boletin Oficial, pidió licencia psiquiátrica para no ser echada.

Mantiene a su esposo, Carlos Leidi, como jefe de Unidad de Revisión y trabaja junto a Nicolás Alegría, ahijado de Liuzzi.

También permanecen Luciano Minuchin, director de Sistemas Informáticos, y amigo de Liuzzi; Javier Fernández De Mayo, sobrino de Liuzzi; José Luis Benzoni, ex marido de la hermana de Liuzzi; su hijo Nahuel Benzoni; María Emilia Elguero, ex novia de Charly Liuzzi; y su hermana María Mercedes Elguero. Donde hubo amor, cenizas quedan.

Además, siguen otros amigos en el área, aunque con funciones acotadas, Miguel Tejada, Paz Miguel, Sofía Palozo, y María Fernanda López, amiga de la ex esposa de Liuzzi y tesorera de Legal y Técnica, cuyos antecedentes no la acreditan para el cargo.

Resisten asimismo en sus puestos Victoria Navarro Ocampo, ex secretaria privada de Liuzzi; Gonzálo García Villanueva, amigo de “Charly”, y Alberto Sette, amigo de Jorge Feijoo, que era el único de planta, con carrera previa al kirchnerismo.

Feijoo fue director del Boletín Oficial y estrechó filas con Liuzzi y Zannini, por lo cual relegó a varios de sus ex compañeros, y ahora fue despojado del cargo y confinado a una oficina de la calle Suipacha al 200. Allí están varios de los desplazados por el kirchnerismo que Clusellas quiere rescatar y que miran de reojo al ahora caído en desgracia.

Macri prepara la mesa para la reunión con los sindicalistas

LA NACION, 7 de febrero de 2016

Como parte de las negociaciones previas a las paritarias salariales, el presidente Mauricio Macri convocará los próximos días a la Casa Rosada a los principales jefes de las centrales obreras sindicales para avanzar en un paquete conjunto de medidas que podrían poner límites a la pauta salarial, con el fin de que no se dispare la inflación.

El Gobierno y los jefes sindicales prepararon un menú, cuyos detalles analiza la Casa Rosada para dar la última palabra: rebajas en el impuesto a las ganancias y el IVA y aumentos en las asignaciones familiares, entre otras cosas. Con esos beneficios a los trabajadores, Macri busca lograr subas salariales de entre 24 y 28%, y no superiores al 30% como exigen diversos sectores del sindicalismo.

“Se está trabajando pero todavía falta”, admitió a LA NACION un alto funcionario del Gobierno, que participa de las negociaciones.

Según trascendió, el jefe del Estado prepara una reunión para el jueves o viernes próximos con los secretarios generales de la CGT, Antonio Caló, de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, y de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo. Podría sumarse el secretario general del Sindicato de Obras Sanitarias, José Luis Lingeri, y otro dirigente cercano a Moyano vinculado con el transporte.

Previo a la famosa “reunión secreta” entre Macri y Moyano, hace dos semanas en Olivos, fue Lingeri quien comenzó a negociar “un menú de medidas para los trabajadores” con el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y con el director ejecutivo de la AFIP, Alberto Abad.

Participó también el titular de la Superintendencia de Servicios de Salud, Luis Scervino, que fue designado por el ministro de Salud, Jorge Lemus, pero que es un médico y dirigente vinculado a Lingeri.

Sólo entonces Lingeri hizo intervenir a Moyano, Caló y Barrionuevo. “Fue un enero sin vacaciones”, señalaron fuentes sindicales.

La gravitante influencia de Lingeri tiene su explicación: Scervino, de su confianza, controla el millonario Fondo de Seguridad Social de 26.500 millones de pesos, cuya devolución negocian los sindicatos con el Presidente. Podría ser bajo la forma de bonos u obras para centros de salud para las obras sociales sindicales. Una clave de la negociación.

En el paquete también se analiza la eliminación de impuesto a las Ganancias a salarios menores a 30.000 pesos y la rebaja en las escalas; la reducción del IVA para la canasta básica de alimentos para sectores vulnerables y el aumento y ampliación de las asignaciones familiares.

También se puso sobre la mesa la libre elección de las obras sociales, un posible aumento de los aportes de monotributistas a ellas, y la posibilidad de recurrir a eventuales sumas no remunerativas para el caso en que se descontrole la inflación.

“Todos estos beneficios para los trabajadores podrían disminuir en 4 o 5 puntos la pauta de las paritarias”, señaló a LA NACION uno de los dirigentes que conversan con el Gobierno.

De ese modo, Macri aspira a bajar el piso de suba salarial de 30 o 35% que plantearon diversos sectores sindicales en estos días.

Pretende así que los acuerdos salariales se estacionen entre 24 y 28%, según el gremio, para que no se dispare la inflación. Caló, Moyano y Barrionuevo coinciden en que cada sindicato negociará en forma individual y de acuerdo a cómo incidan en cada sector los beneficios del paquete de medidas que Macri expondría en la próxima reunión con los líderes sindicales.

Abad analiza el impacto fiscal de esas rebajas tributarias. Se perderían ingresos por 30.000 millones de pesos. Pero se compensarían por el recorte del gasto en subsidios de 110.000 millones de pesos derivado del aumentos de tarifas de luz (60.000 millones) y próximamente gas (50.000 millones).

“Se abrieron las puertas de Trabajo”, celebró una fuente sindical. “Queremos que atiendan los aumentos de precios por la reciente devaluación, la expectativa de inflación y la suba de tarifas”, explicó el dirigente. Barrionuevo también planteará que la caída del 40% del turismo interno afectó al sindicato de gastronómicos y pedirá la desarticulación de millonarias transferencias del Ministerio de Trabajo a los amigos del kirchenrismo.

“Vamos a negociar este menú que armamos y que prepara el Gobierno y que nos presentarán. Veremos que tiene el Presidente para nosotros y se negociará individualmente por actividad, según como incida en cada una ganancias, IVA o asignaciones familiares”, dijo un jefe sindical.

Macri completó el curso político de verano. Programa emitido el 6 de febrero de 2016

Apertura

Mariano Obarrio y José Antonio Díaz

 

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Mariano Obarrio, conductor UCV

 

Entrevista I

Javier David, DN por Salta (PJ)

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Javier David, DN Salta (PJ)

Entrevista II

Andrés Ibarra, Ministro de Modernización

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Andrés Ibarra, Ministro de Modernización

Verdades en la Mesa 

Mariano Obarrio y José Antonio Díaz

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Entrevista III

José Luis Lingeri, Secretario General del sindicato de Obras Sanitarias

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Jose Luis Lingeri, Secretario General del sindicato de Obras Sanitarias

El Gobierno llama a extraordinarias para apurar las designaciones en la Corte

LA NACIÓN, 6 de febrero de 2016

El gobierno de Mauricio Macri anunció ayer que convocará a sesiones extraordinarias en el Senado para el jueves próximo con el propósito de adelantar el proceso de aprobación de los dos candidatos a jueces de la Corte Suprema, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, propuestos por el Poder Ejecutivo, que aspira a lograr el acuerdo de los dos tercios de la Cámara alta en la sesión del jueves 25 de febrero próximo.

De ese modo, se daría ingreso formal a los pliegos el jueves 11 del actual. Según el decreto que se disponía ayer a firmar el Presidente, el llamado a sesiones extraordinarias contemplará también el tratamiento de los ascensos militares y el nombramiento de embajadores políticos designados.

Según pudo saber LA NACIÓN de altas fuentes de la Casa Rosada, la convocatoria a extraordinarias, algo que Macri había evitado originalmente, obedece a un “acuerdo cerrado” con el bloque de senadores del PJ, que dirige Miguel Pichetto. El senador rionegrino anticipó su predisposición a tratar los pliegos a cambio de que el Gobierno retrocediera en su decisión original de nombrarlos por decreto y en comisión.

El 14 de diciembre último, el Presidente había designado a Rosatti y a Rosenkrantz como jueces de la Corte “en comisión” mediante el decreto 83/2015. Ello desató el rechazo del peronismo en el Congreso y de varios de sus aliados de Cambiemos.

Además, ese error político terminó unificando a los diputados y senadores del PJ, divididos entre kirchneristas duros y peronistas históricos. Muchos sectores reclamaron sesiones extraordinarias pero el Presidente se mantuvo firme.

Sin embargo, Macri aceptó entonces un acuerdo con el presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, para postergar la asunción de Rosatti y Rosenkrantz hasta febrero y poner en marcha el mecanismo de impugnaciones previsto en el decreto 222/2003 para designar miembros del máximo tribunal, plazo que se venció el viernes último.

De hecho, los dos candidatos aún no asumieron en la Corte y el lunes último Macri envió los pliegos al Senado. La convocatoria a extraordinarias es una señal amigable al Senado para que sea esta cámara la que los apruebe con los dos tercios como ordena la Constitución. También un intento del Gobierno por poner en funcionamiento el Congreso.

“Está avanzado un acuerdo con el PJ y por eso enviamos los pliegos el lunes último”, dijo a LA NACIÓN un allegado al Presidente y al ministro de Justicia, Germán Garavano.

Ese entendimiento es parte del diálogo abierto entre la Casa Rosada y los gobernadores del PJ que impulsaron la reciente ruptura en el bloque del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados y conformaron el nuevo Bloque Justicialista.

En ese diálogo político, el peronismo más alejado del kirchnerismo, con el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, a la cabeza, garantizaría gobernabilidad y quórum para sancionar leyes en el Congreso, mientras que Macri se comprometió a asistir económicamente a las provincias.

Según la Casa Rosada, el jueves próximo se abriría entonces el período de sesiones extraordinarias y la Comisión de Acuerdos del Senado, que presidirá el senador Rodolfo Urtubey, del PJ de Salta y hermano del gobernador de esa provincia, se constituirá el viernes 12 de febrero a fin de convocar a una audiencia pública para debatir las designaciones.

El jueves se aprobará además el retiro de los pliegos de Domingo Sesín y Eugenio Carlos Sarrabayrouse, que habían sido propuestos por el gobierno anterior. La comisión elaborará luego un informe y elevará los pliegos al recinto de la Cámara. La expectativa de Garavano y de Macri es que se aprueben en la sesión del jueves 25 del mes actual.

De ese modo, el presidente Macri podría pronunciar su primer discurso de apertura de sesiones ordinarias del Congreso, el 1° de marzo próximo, con un importante logro parlamentario. Paradójicamente, el retroceso de convocar a extraordinarias le garantizaría un éxito político.

La Corte quedaría entonces conformada por cinco miembros, sumados Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco y Carlos Maqueda.

Por otra parte, el 16 de febrero se constituiría la Comisión de Seguimiento de los Decretos de Necesidad y Urgencia, que presidirá el senador Luis Naidenoff (UCR-Formosa), que deberá examinar los últimos DNU.

Además, la Comisión de Acuerdos analizará y elevará al recinto los pliegos de los embajadores propuestos por el Ejecutivo: Martín Lousteau (Estados Unidos), Diego Guelar (China), Guillermo Montenegro (Uruguay), Marcelo Stubrin (Colombia), Ramón Puerta (España), Miguel Del Sel (Panamá) y Juan Carlos Magariños (Brasil), entre otros.

En la misma comisión, se designará la nueva conducción de las Fuerzas Armadas y del Estado Mayor Conjunto.

El temario de la primera sesión de la era macrista

La fecha clave

El ingreso formal a los pliegos será el jueves 11 de febrero. Pero el Gobierno aspira a lograr el acuerdo de los dos tercios de la Cámara alta en la sesión del jueves 25.

Agenda amplia

El llamado a extraordinarias contemplará también el tratamiento de ascensos militares y el nombramiento de embajadores políticos designados.

Embajadores

Algunos de los pliegos que se tratarán son los de Martín Lousteau (Estados Unidos), Diego Guelar (China), Guillermo Montenegro (Uruguay), Marcelo Stubrin (Colombia), Ramón Puerta (España) y Miguel Del Sel (Panamá)

Acuerdo con el peronismo

Allegados a la Presidencia señalan que está avanzado un acuerdo con senadores peronistas, para que los pliegos de los jueces obtengan los dos tercios necesarios para que sean designados

Macri negoció con Moyano para limitar los pedidos gremiales

LA NACIÓN, 5 de febrero

En medio de la escalada verbal por la discusión salarial, el presidente Mauricio Macri descomprimió la tensión con el secretario general de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, y acordó en secreto los criterios básicos para fijar una pauta de aumentos que respete las pretensiones del Gobierno y del sindicalismo: en las negociaciones paritarias estimarán el impacto de las rebajas en el impuesto a las ganancias y en el IVA para calcular un índice de aumentos más cercano al 25% que al 30%.

El Presidente y todos sus voceros confirmaron ayer que existió esa reunión reservada entre Macri y Moyano en la residencia de Olivos, la semana pasada, tal como adelantó ayer el diario Ámbito Financiero.

“Se acordó un marco conceptual, no se habló de números. Mientras hay declaraciones fuertes en el escenario político se está negociando en reserva”, confirmó a la nacion un funcionario macrista.

“Los números los irán afinando, pero la aspiración del Gobierno es que cierren entre un 20% y un 25% de aumento, contemplando el impacto positivo que tendrán en los sueldos las rebajas en Ganancias y en el IVA para los alimentos”, señaló otra alta fuente oficial.

La negociación también incluiría las subas en asignaciones familiares y el reparto de los fondos de las obras sociales, además de acuerdos de sumas no remunerativas en caso de que se dispare la inflación.

Durante la semana última, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, había estimado un techo de aumentos del 25% y varios dirigentes gremiales salieron al cruce. El propio Moyano, que ya había hablado con Macri, replicó que “si quiere limitar las paritarias, entonces, vamos a empezar a hablar en otro idioma”.

Así las cosas, los principales sindicatos mantendrán en público su exigencia de un piso de 30%, mientras la Casa Rosada terminará y presentará los proyectos de ley de rebajas en el impuesto a las ganancias y la eliminación del IVA a los alimentos para los sectores de menores recursos. Sólo entonces se evaluará cómo beneficiarían los salarios para luego intentar una rebaja en aquel piso del 30%.

La reformulación por ley del impuesto a las ganancias consistirá en elevar el piso salarial a partir del cual se paga Ganancias, de 15.000 a 30.000 pesos, y retocar las escalas.

En Balcarce 50 no descartaron, además, poner en la negociación el reparto de los 26.000 millones de pesos del fondo para las obras sociales sindicales, que la ex presidenta Cristina Kirchner le denegó a los gremialistas y que es un viejo reclamo de Moyano y los sindicatos más numerosos, como Comercio, Sanidad, Construcción -los llamados “gordos”-, además de Camioneros.

“Éste es un gobierno que está demostrando la intención de discutir todos los temas, todo lo que el anterior no discutía: Ganancias, asignaciones familiares y los fondos para las obras sociales”, dijo a LA NACIÓN un ministro involucrado en esas negociaciones.

Los proyectos de ley de Ganancias e IVA, entre otros, serán anunciados por Macri en su discurso de apertura de sesion

En el Gobierno aseguraban ayer que “la reunión con Moyano fue la continuidad de una serie de reuniones que vienen manteniendo” y que en ellas “el Presidente le transmite que es un momento bisagra y que en el cambio todos tenemos que poner el hombro”. Y que “si todos pedimos el 40% de aumento la inflación no bajará”. Habrá nuevas reuniones.

La prioridad de negociar con el líder de Camioneros obedece a que “Moyano no es sólo Camioneros”, sino que lidera la CGT Azopardo y a los sindicatos de transportes, que “son estratégicos porque sus huelgas suelen parar al país”. De hecho, esa negociación abrió la puerta a la reunión de ayer entre la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), que lidera Juan Carlos Schmid, y los ministros de Trabajo, Triaca, y de Transporte, Guillermo Dietrich.

Esa agrupación engloba a más de veinte sindicatos del transporte, como La Fraternidad, Camioneros, Colectiveros, Aeronavegantes, Portuarios, Guincheros y Grúas Móviles, Motoqueros, Dragado y Balizamiento, Señaleros y Marina Mercante, entre otros.

Las declaraciones de Dietrich, luego del encuentro, marcaron la sintonía que se abrió entre ambas partes. En el Gobierno descuentan que ese acuerdo con Moyano tendrá el visto bueno de la otra CGT, la que dirige Antonio Caló, y de los gremios llamados “gordos”.

edición: María del Mar Monte de Robles